Los beneficios fisiológicos y físicos de expresar gratitud en relación con nuestra vida personal se han estudiado y demostrado desde hace algún tiempo. Sin embargo, la gratitud en el lugar de trabajo y a través de la marca y las comunicaciones no se practica realmente en un sentido generalizado.

Las marcas y empresas que muestran un propósito sólido y una conexión significativa con sus partes interesadas (empleados, clientes, clientes objetivo y la comunidad) han demostrado un mejor desempeño a largo plazo.

La ciencia detrás de esto

Los científicos han sugerido que al activar el centro de recompensa del cerebro, el intercambio de gratitud altera la forma en que vemos el mundo y a nosotros mismos.

El Dr. Alex Korb, en su libro Upward Spiral, mencionó que la gratitud nos obliga a centrarnos en los aspectos positivos de la vida.

Cuando damos y recibimos notas de agradecimiento, nuestro cerebro se redirige automáticamente para prestar atención a lo que tenemos, lo que produce una motivación intrínseca y una fuerte conciencia del presente.

¿Cómo lo conectamos con tu marca y lo comunicamos? Cuando una marca se conecta de manera auténtica con su audiencia y muestra un verdadero aprecio por su participación, eso en última instancia se traduce en lealtad y compromiso y, a la larga, repercute en los resultados finales.

Cuando practiques la gratitud con tu equipo y tus clientes, serán más productivos y leales y, con suerte, demostrarán su apoyo para atraer nuevos clientes.

En última instancia, la gratitud como ingrediente clave de su marca y sus comunicaciones puede conducir a conexiones más profundas con sus clientes y a una marca duradera que impulse el crecimiento.

¡Feliz Acción de Gracias!

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